8/11/17

Billy Elliot - Madrid

He de confesar que vi por primera "Billy Elliot: El Musical" gracias a Netflix, ya que subieron la versión Británica. Eso fue el año pasado, pero lo que nunca me imaginé fue que lo vería en directo 8 meses después.

Cuando llegué a Madrid, veía carteles de "Billy Elliot" por todos lados. Me emocionaba al ver que la gente hablaba tan bien del musical, del casting y de la producción. Tenía que verlo. Unos días después de mi llegada, mis tíos y yo decidimos que iríamos a ver un musical. Decidimos que ver "Billy Elliot: El Musical" sería una buena opción, además de que el Casting era fenomenal, la música compuesta por Sir Elton John le dio un plus para que mis tíos se terminaran convenciendo de que era la mejor opción.

Llegó el día y yo estaba emocionada y nerviosa. Me encantó ver como el teatro en Madrid es realmente un plan para cualquier día. Como se llenaba el teatro, como se sentía la expectación de lo que iba a suceder. La gente que ya lo había visto salía emocionada y hablaba maravillas de la historia de un chico que quería bailar Ballet. Cuántos escépticos habrán llegado con otras ideas a ver el musical y habrán salido pensando totalmente diferente.

Cuando dieron la tercer llamada, mi corazón dio un vuelco, y desde el primer segundo, ya estaba totalmente enganchada a la historia.

Me di cuenta de que Billy y yo teníamos varias cosas en común. Billy no quería bailar al principio y no por que no quisiera, si no por que la gente, pero sobretodo su padre, decía que si un hombre bailaba Ballet era gay. Cuántos comentarios, hoy en día, siglo XXI, se siguen escuchando "baila Ballet? entonces es gay", es algo que jamás lograré comprender. Billy tenía un sueño, como muchos de nosotros tenemos. Es cuestión de luchar y darlo todo siempre, sin importar lo que la gente diga o piense. No hay que tener miedo. El tiempo es el que es, y hay que vivirlo. El haberme identificado con Billy en distintos aspectos, hizo que la historia me llegara todavía más al corazón. Lloré y reí como hace mucho tiempo que no lo hacía. Eso, no cualquiera lo logra. Hacer reír a la gente y lograr conectar con el público es la tarea  más difícil de cualquier montaje, sea musical o no, sea teatro o televisión. Pues "Billy Elliot: El Musical" logró conectar conmigo desde el minuto uno.

Y que decir de las actuaciones, con el casting tan perfecto que se eligió para dicho montaje. Bien lo han dicho varias veces, encontrar a niños que claven el papel de Billy era difícil, mas no imposible. Tuve el honor de ver actuar a Pablo Bravo como Billy Elliot y Álvaro de Juana como Michael, a Adrian Lastra como Tony, Mamen García como la Abuela, a Juan Carlos Martín como el Padre de Billy y a Natalia Millán como la Señorita Wilkinson. No hay mas que ver quienes son los actores, para saber que la obra estaría perfecta. Había visto actuar a Adrian Lastra en televisión al igual que a Natalia Millán, pero, verles en directo, fue un honor para mi. Me quedé con ganas de conocerlos en persona y poder charlar un poco con ellos, darles la enhorabuena en persona.

Fue la mejor experiencia para mi viendo un musical, y he visto muchos, pero nunca uno como "Billy Elliot". La producción, el montaje, el guión, la traducción de las letras, todo perfecto.

Así que, si están en Madrid, no duden en ir a ver "Billy Elliot: El Musical".